Si bien los datos son escasos y desconocemos el final de la actuación de Belluga en la consecución del oficio y misa del Corazón de Jesús, si podemos confirmar la intervención, en 1735, del Prelado motrileño en esta causa.
Habiéndole hecho llegar el Arzobispo de Burgos veinte cartas de Obispos españoles adhiriéndose a la petición de oficio específico para el culto al Sagrado Corazón, junto con una petición expresa del rey Felipe V, Belluga, en palabras que no dejan lugar a duda sobre su decisión de apoyar la causa, le contesta en los siguientes términos:
"Viva Jesús. -Rmo. Señor. -Sr. mío: Recibí la de V. S. con la carta (real) para S. Santidad para el oficio y misa del Corazón de Jesús, cuya gracia espero se consiga, no obstante que tres veces ha salido denegada en la S. Congregación de Ritos: la primera, pidiéndola el Rey de Polonia; la segunda, pidiéndola S. Majestad (el Rey de España); y la tercera, pidiéndola la Reina de Francia: mas siempre por uno o dos votos. Yo siempre he estado fortísimo por esta gracia, y habiendo ya muerto dos Emmos. que gallardamente la contradecían, espero que con la nueva carta de S. Majestad se puedan vencer las dificultades que se proponían, las que no eran todas despreciables, mirando todas a la dificultad de cuál era el objeto de esta fiesta. Y por dividir las dependencias del Ministro, he dado la carta al Emmo. Aquaviva para que la presente a S. Santidad con las que yo tengo acá de los Sres. obispos: y a mi cuidado queda la solicitud. Y quedo al servicio de V. S. con el más verdadero afecto, y ruego a N. Señor guarde a V. S. muchos años en su santa gracia. -Roma y Julio 31 de 1735. -Rmo. Sr. De V. S. muy afecto. -L. Cardenal Belluga”